En su primer documental en más de 35 años, Janet Baker habla más abierta y emocionalmente que nunca sobre su carrera y su vida actual. Con extractos de sus mejores papeles en el escenario (como Dido, Mary Stuart, Julius Caesar y Orpheus), así como de sus apariciones en la sala de conciertos y estudio de grabación (obras de Beethoven, Handel, Berlioz, Schubert, Elgar, Britten y Mahler ), recuerda las emociones y las trampas de la actuación pública. El documental "sensible, conmovedor... [e] imperdible" de John Bridcut (The Observer) ilumina las presiones personales y profesionales de la vida de Dame Janet como música y artista, destacando tanto la determinación como la ternura que le permitieron navegar por ellas, y tratando de manera más amplia temas de envejecimiento, vida y pérdida. Ella le cuenta al cineasta John Bridcut sobre la pérdida traumática de su hermano mayor cuando ella tenía solo diez años, y cómo esa experiencia influyó en su voz y su arte. Ella explica por qué sintió la necesidad de jubilarse anticipadamente hace unos treinta años y analiza los desafíos que ella y su esposo deben enfrentar en la vejez. También da pistas tentadoras a la pregunta que a menudo hacen sus muchos fanáticos: ¿todavía canta hoy a la edad de 85 años? En entrevistas filmadas, colegas artistas como Joyce DiDonato, André Previn, Felicity Lott, Jane Glover, Raymond Leppard, Imogen Cooper y John Copley se maravillan con el canto de Baker y señalan sus momentos de genialidad.
